Volver a estudiar en la universidad después de estar 10 años fuera de ella sonaba para mi una completa locura y más aun siendo madre soltera de dos chicos y con dos trabajos. Ese fue mi pensar durante muchos años y aunque anhelaba terminar el bachillerato no lo encontraba viable con el estilo de vida que llevaba, hasta que en el 2022 comencé en un nuevo empleo de maestra asistente en el Programa de Head Start en donde mi supervisora vio un potencial. Cada día mencionaba las cualidades que tenía y me motivaba a volver a estudiar hasta que un día me convenció y con una gran preocupación, ansiedad y sobre todo miedo a volver y no poder lograrlo me matriculé en agosto de 2022 en el Programa Ahora del Sistema Universitario Ana G. Méndez.
Al comenzar los estudios, en donde en los primeros cursos lloré y sufrí hasta que en ese primer semestre encontré compañeras que se convirtieron en amigas de por vida, que me apoyaron y me llevaron de la mano hasta retomar el curso y ponerme a ritmo con los demás. En diciembre de ese mismo año decido por razones familiares renunciar a mi trabajo de asistente de maestra en Head Start y solo trabajar en el Part Time en donde puedo estar más presente en la vida de mis hijos los cuales ya casi no veía ni compartía. Desde entonces me he dedicado a dar lo mejor y el promedió que llevo habla por todo el sacrificio que he hecho en todo este tiempo, hasta que en noviembre del pasado año nos enteramos de que el secuencial de educación cambió por el Departamento de Educación de Puerto Rico afectando a todos los que estudiamos Educación preescolar Kinder a tercero que no se gradúan en diciembre de 2024. A raíz de este cambio nos removieron cursos completados ya que algunos fueron eliminados del secuencial y nos añadieron más alargando el tiempo de estudio, perdiendo dinero de cursos que ya había tomado y fueron eliminados creando una preocupación extra por que al menos para mí era demasiado importante terminar.
Ya es mayo de 2024 y hace unos días me entero de que tengo una deuda en la universidad y llego a la universidad para conocer la razón de la misma y me informan que ya la Beca PELL ya se había agotado, al recibir esa noticia difícil me orienté en la universidad y me recomendaron buscar becas que permitan seguir el ritmo de estudios que llevo sin afectar otras áreas personales y por eso me encuentro aquí. Puedo dejar de estudiar y dedicarme a otras cosas, pero rápidamente recuerdo el primer día que descubrí mi pasión por enseñar a mis 14 años mientras trabajaba como tutora en el centro Asociación Misionera Espiritual. En el que me di cuenta como la manera en que me dirijo a los niños mientras les enseño puede cambiar una vida por completo.
Educar para mi es alegría, satisfacción, compromiso y mucha pasión en donde pueda influir no solo en ese año escolar si no que al pasar de los años uno de esos niños se acerque y recuerde cuán importante y hermoso fue ese tiempo compartido, lo mucho que aprendió y se divirtió. Deseo impactar vidas y ser esa ayuda que necesitan los niños que tengan alguna necesidad especial y mostrarle que hay esperanza y no están solos. Yo Rosedlee Pérez Torres, deseo ser una gran maestra y una madre extraordinaria y esta beca significa un respiro en este proceso importante en mi hogar, espero que puedan tomarme en consideración.
Introduction:
Education holds an irrefutable significance in shaping our lives, enabling us to fulfill our aspirations, break free from the constraints of circumstance, and make a positive impact on society. As a first-generation college student and a single mother, the value of education resonates deeply with me. Moreover, my unwavering passion for nursing, driven by a genuine desire to improve people's health, further amplifies the importance of obtaining an education. In this essay, I will elucidate the reasons why acquiring an education holds immense personal significance and how it empowers me to make a difference in the world.
Being a first-generation college student, I am keenly aware of the challenges that lie ahead. Nevertheless, I firmly believe that education has the power to transcend boundaries and provide opportunities for personal growth. By pursuing higher education, I am breaking free from the cycle of limited opportunities and setting a precedent for future generations of my family. Education equips me with the necessary tools to overcome obstacles, empowering me to transform adversity into triumph and to bring new opportunities to the next generations of my family.
As a single mother, my pursuit of education embodies the belief that I am not limited by my circumstances. By acquiring knowledge and skills through education, I can provide a secure future for my child and I. Education broadens my horizons, enhances my critical thinking abilities, and equips me with the tools to navigate the complexities of life. It instills within me the confidence and independence required to provide the best possible life for my little girl.
The field of nursing captivates me because it offers a profound opportunity to positively impact the lives of others. With an education in nursing, I can combine my passion for healthcare and my innate desire to help others. Education arms me with the expertise and understanding necessary to provide comprehensive care and support to individuals in need. Through my knowledge, empathy, and skills, I can contribute to the well-being of individuals, families, and communities of my country.
As a first-generation college student and a single mother pursuing a career in nursing, I become a beacon of hope for others facing similar challenges. My journey serves as an inspiration to those who believe that their circumstances define their future. By embracing education, I can break barriers and demonstrate that anyone, regardless of their background, has the power to achieve their dreams. I aim to foster change, empower others, and encourage them to embrace the transformative potential of education.
Conclusion:
Education is a catalyst for personal growth, empowerment, and societal progress. My pursuit of education holds profound significance, as it not only transcends the limitations imposed by circumstance but also enables me to make a tangible difference in people's lives. Through education, I gain the knowledge, skills, and confidence necessary to excel as a nurse and positively impact the health and well-being of those in need. Moreover, my journey serves as a testament to the transformative power of education, inspiring others to believe in their potential. Education empowers me to chart my own path, create a brighter future for my child, and contribute meaningfully to the world.